lunes, 15 de junio de 2009


ATLAS/ti para la investigacion cualitativa
EL Trabajo Intelectual y sus Tecnicas
El presente artículo trata de un programa muy relacionado con: Atlas/ti, obra principalmente de Thomas Muhr, de Berlín, informático y psiquiatra.
Atlas/ti pertenece a la familia de los programas para Investigación cualitativa o de análisis cualitativo de datos. En los últimos años han empezado a ser utilizados en distintas disciplinas: sociología, antropología, psicología, pedagogía. Seguramente a otras llegan con más lentitud, en parte por las manías y prejuicios corporativos que nunca faltan.

¿Se trata de bases de datos?. Cuando hablamos de bases de datos (o de sistemas de gestión de bases de datos) normalmente pensamos en datos muy estructurados, con una serie de campos muy definidos, con elementos (registros) que repiten una distribución y orden, tal vez hasta la extensión. Existen, ciertamente, las bases de datos documentales, que están concebidas para organizar y recuperar datos que no necesariamente Atlas\ti para la invetigacion cuantitativa y cualitativa
siguen unas pautas muy rígidas y que pueden muy bien estar compuestas de textos de longitud variable. En ocasiones no hace falta recurrir a herramientas especializadas: hay personas que a partir de procesadores de texto como Word o WordPerfect elaboran unas estrategias que les permiten obtener resultados similares. Existen incluso aplicaciones gratuitas o semigratuitas que pueden también permitir muy buenos resultados (a ellas esperamos dedicar atención).
Pero aquí se trata de algo más que el almacenaje de datos y el fácil acceso posterior a ellos. En el caso de Atlas/ti, la localización y recuperación de los datos tiene lugar sin problemas. Pero disponemos de la ventaja añadida de que se nos facilitan toda una serie de herramientas para tejer relaciones entre los más variados elementos de nuestros datos, para hacer explícitas nuestras interpretaciones y para poder, en determinado momento "llamar", a todos los elementos que pueden apoyar tal o cual argumento o conclusión. Esto último puede ser de especial valor cuando llega el momento de redactar, de comunicar a otros nuestros resultados.

Tanto nuestros datos originales como las relaciones que creamos entre ellos constituyen conocimiento. Aquí considero conocimiento, en el contexto de una investigación, a la suma de nuestros datos en el momento en que a ellos se superpone una estructura de relaciones, de asociaciones, que va enfocada a un fin. Este fin puede ser un estudio para la mejora del servicio de atención al cliente de una empresa, nuestra Tesis Doctoral, la gestión de un catálogo de piezas y componentes en que se tenga que atender a relaciones complejas, las pesquisas para la resolución de un crimen... o cualquier cuestión sobre la que pretendemos profundizar y ampliar lo que sabemos.
Es posible que Atlas/ti produzca desconcierto en un primer momento; no es para extrañarse demasiado. Estamos ante algo un poco más complejo que un procesador de textos; hay términos y procedimientos que no tienen porqué sernos familiares. También puede ocurrir que el posible usuario o curioso no vaya muy bien encaminado: si está buscando catalogar una colección de sellos, probablemente encontrará programas más adecuados y de aprendizaje más sencillo. Si, por el contrario, prepara un libro sobre la gramática visual del sello, puede que haya dado con algo útil para él.
Un eventual desconcierto inicial no tiene que dar paso al pánico o el desánimo. La dificultad no está tanto en comprender el uso físico del programa, el saber qué botones hay que pulsar para qué funciones, como en su filosofía. Si el usuario necesita un programa de este tipo es muy probable que algunas de las cosas que ofrece Atlas/ti las haya intuido o deseado con anterioridad. Se trata, pues, de descubrir esas capacidades y ver si corresponden a lo que pretendemos. El descubrimiento puedo asegurar que no deja de tener su emoción. No hay que dejarse asustar por algunos términos ni confundirse con la multitud de botones de uso al principio desconocido.
Así, cuando instalemos la versión de demostración y mientras el programa se inicia, no hay que dejarse intimidar por el acorde que suena por los altavoces, entre misterioso y solemne (seguro que no es casual). Hay que tomarlo con calma, investigar y pasar una y otra vez de la documentación al programa y viceversa. Y cuando empiecemos a entender algo y a organizar nuestra primera Unidad Hermenéutica (de nuevo algo que suena misterioso y solemne) llegarán las primeras satisfacciones.
Ha llegado el momento de entrar en algún detalle sobre el programa y su uso. En Atlas/ti desarrollamos nuestro proyecto intelectual, llamado Unidad Hermenéutica (UH) al modo de un edificio en en el que utilizamos distintas piezas con sus propias cualidades y funciones. Vamos a describir primero esos materiales de construcción y posteriormente el proceso de construcción.

Elementos de construcción del edificio. Los objetos de Atlas/ti
-los documentos primarios, documentos en texto (o bien documentos gráficos o sonoros) situados en cualquier parte del disco duro. Permanecen como ficheros independientes. Atlas/ti no los modifica ni los guarda para sí; almacena referencias a ellos, pero el fichero sigue intacto. Una UH apenas crece aunque se le agreguen docenas de documentos primarios nuevos, ya que lo que se agrega es una simple referencia. En todo momento podremos recuperar los ficheros de esos documentos primarios desde cualquier otro programa.
-las citas, fragmentos de los documentos primarios que han sido marcados como tales desde Atlas/ti. Se supone que marcados con alguna finalidad relacionada con su significación. Citas pueden ser una cadena de texto (desde una palabra hasta muchos párrafos) o un área de un gráfico. Las citas nos van a permitir hilar muy fino; si para determinado fin lo que nos interesa es esa frase de ese documento, vamos a poder apuntar precisamente a esa frase, sin necesidad de crear un nuevo documento o texto independiente.Las citas pueden perfectamente solaparse, puede haber intersección entre ellas, etc.
-los códigos, son palabras-clave (keywords), indicadores de conceptos o de expresiones que interesan al usuario, por la razón que sea. Los códigos suelen utilizarse para marcar (codificar) determinadas citas. Un código puede marcar multitud de citas distintas en un número ilimitado de documentos. Y una misma cita puede estar marcada por distintos códigos.
-las notas (llamadas memos en Atlas/ti), normalmente textos breves que contienen ideas y que se asocian a alguno de los otros tipos de objetos (aunque también pueden no estar asociados). No hay que confundirlas con los comentarios aclaratorios que cualquier objeto puede llevar, dado que las notas a que ahora aludimos tienen entidad propia... lo que implica que en una vista de red pueden ser un nodo. (Véase más abajo a qué me refiero con redes).
-las familias, un conjunto de objetos que comparten una cualidad. Puede haber familias de códigos, de documentos primarios, etc. Por supuesto, un mismo elemento puede pertenecer a distintas familias. Pueden ser la base de un filtro: en determinados momentos nos interesará restringir una búsqueda a los miembros de tal o cual familia. -las vistas de redes, compuestas de nodos y relaciones. Para crear estas redes existe un editor específico. Los nodos pueden ser cualquiera de los objetos antes descritos: desde una cita hasta un código. Las relaciones son los nexos establecidos entre esos nodos y se representarán por flechas de distinto tipo... pero ocurre que de hecho hay distintos tipos de relaciones. Pueden ser del tipo "forma parte de", "apoya a", "contradice a" o como nosotros las definamos. Hay que diferenciar entre una red y una vista de red. La red es el conjunto de todas las relaciones entre los elementos de un proyecto o UH; la vista de red puede centrarse en sólo una parte de esas relaciones o de esos elementos.
Todos los objetos llevan datos sobre la fecha y hora de su creación e incluso, si nuestro trabajo es en equipo, podremos distinguir entre las aportaciones de los distintos colaboradores

Construcción de un proyecto. Uso de Atlas/ti
Vamos a dar una lista numerada de las tareas, teniendo en cuenta que en realidad serán acciones que probablemente se intercalen y repitan una y otra vez en el tiempo. Se supone que el proceso típico sería el siguiente:
1) Crear un proyecto y utilizarlo como "contenedor" de nuestros materiales. Reunimos nuestros documentos primarios y los asignamos a una Unidad Hermenéutica (UH, el nombre que se le da en Atlas/ti a ese proyecto) a la que ponemos un nombre. Los documentos primarios pueden ser los textos que tengamos que interpretar, nuestras notas de lectura de obras sobre los temas que nos interesan, apuntes de nuestras reflexiones, trascripciones de entrevistas que hayamos realizado, fotografías, documentos que hayamos digitalizado...
Cualquiera de esos materiales permanece intacto y puede ser reutilizado (y usado simultáneamente) en diversos proyectos.
2) Análisis-Codificación. Analizamos los documentos y vamos marcando en ellos citas, pasajes. Asignamos a estas citas distintos códigos, que pueden estar creados previamente o que podemos ir creando sobre la marcha. Por supuesto, un código puede estar asignado a multitud de citas y cada cita puede estarlo a muchos códigos. Un recurso complementario para el análisis es la posibilidad de establecer relaciones directas entre citas, relaciones del tipo "contradice a", "apoya a", o las que nosotros podamos crear. Entre los códigos, la asignación de citas a códigos y las relaciones directas entre citas, es posible crear una auténtica malla hipertextual, en la que convivan varios hilos argumentales que pueden estar en constante actualización, a medida que profundizamos en el análisis o vamos incorporando nuevos datos.
3) Notas. Eventualmente, se nos pueden ocurrir ideas que no van pegadas a un documento primario. Las redactamos en forma de nota. No forman parte de un texto externo (caso de los documentos primarios), sino que directamente están incluidas en la UH. También a ellas pueden asignárseles códigos.
4) Teorizar/Interpretar. Se supone que a estas alturas, analizados nuestros datos, hemos ganado mucho en nuestro conocimiento de estos y en la comprensión de los fenómenos y relaciones que subyacen en éstas. A "tejer" esto se le puede llamar trabajo de teorización . Como resultado de esto (o tal vez como ayuda para esto) podemos organizar nuestros objetos en redes; para ello contamos con un editor especial, una especie de pizarra a la que podemos traer cualquiera de los objetos antes mencionados. Evidentemente, se nos quiere facilitar un trabajo de construcción de mapas conceptuales, en este caso más complejos y con más potencialidades que en un programa enfocado exclusivamente a ello como pudiera ser VisiMap (al que pronto CasiNada piensa dedicar un artículo). Pero ocurre, además, que estas vistas de red (pueden, por cierto, convivir tantas como queramos en una UH, ya que en el fondo no son sino vistas parciales de las relaciones dentro de la UH) tienen cualidades que nos permitirán profundizar en nuestra teoría en construcción y (esto es un punto importante) poder recorrer el camino hacia atrás y recuperar aquella cita o aquella nota que fundamenta tal o cual hipótesis. Ese camino hacia atrás puede sernos necesario en distintos momentos: cuando nos cuestionamos algo y queremos someterlo a verificación o cuando pretendemos exponerlo a otras personas y queremos recurrir a la "cita" exacta que está en la base de nuestra afirmación. Hay un camino adelante y atrás que nos recuerda la descripción de Pierre Vilar del trabajo del historiador como un constante recorrido del ejemplo al razonamiento y del razonamiento al ejemplo, algo que podríamos extender a tantísimos campos del trabajo intelectual.
5) Búsquedas. En cualquier momento podemos formular búsquedas a través de todos los componentes de la UH. Pueden ser de tipo simplemente textual (se nos ofrecen recursos para hacerlas bastante complejas si lo precisamos) o aprovechar la asignación de códigos a citas y las distintas relaciones entre los elementos, mediante lo que se llama aquí "búsqueda semántica", etc.
Las redes Las redes tienen unas potencialidades que parecen prometedoras: una vez que hemos establecido relaciones de oposición, de apoyo o del tipo que sean, podríamos llegar a formular búsquedas del tipo: "quiero las citas que contradicen la afirmación de que Bruto mató a César". Aquí alguno dirá: eso será si habíamos definido un código del tipo "Bruto no mató a César". Pues no. Bastará con que determinados códigos que pudieran haber sido establecidos y asignados con finalidades totalmente distintas nos parezcan en determinado momento contradictorios con la afirmación "Bruto mató a César" y en una vista de red los enlacemos en relación de contradicción con la afirmación opuesta. Atlas/ti será capaz de utilizar esa relación de oposición entre códigos (o directamente entre códigos y citas, o entre cita y cita) para llevar a cabo esa búsqueda. Al ser posible vincular entre ellos los códigos, se pueden realizar búsquedas que recuperen los pasajes marcados (codificados) con los sub-términos de tal o cual código. Imaginemos que el código colores esta vinculado a los códigos gris, amarillo, pardo. Una búsqueda por los subtérminos de colores nos traerá cualquier fragmento que hubiésemos codificado con gris, amarillo o pardo.
Pensemos ahora que esta exposición lineal es sólo a efectos de explicación. La codificación (marcado de citas y asignación a códigos) se podrá hacer en cualquier momento, aunque hayamos establecido muchas redes. Un nuevo documento primario (o un gran número de ellos) se puede añadir en un momento avanzado de nuestro trabajo, las relaciones pueden cambiar en tal o cual red, las redes pueden fundamentar nuevas búsquedas y éstas llevarnos a modificar las relaciones entre nodos, etc.
Quedan fuera de este artículo detalles sobre otras muchas capacidades de Atlas/ti como la producción de datos para paquetes estadísticos (especialmente el Statistical Package for the Social Sciences o SPSS), el facilitar el trabajo en equipo, o la exportación de una UH, con sus relaciones a formato HTML (el formato de las páginas Web, en que está escrito este mismo documento).
Por ahora, me conformaría con que estas líneas diesen algunas pistas a quien estuviese interesado en estos asuntos y que facilitasen algo el trabajo a la hora de enfrentarse con la versión de demostración de Atlas/ti. Creo que tras analizar el programa y con ayuda del manual (ambos disponibles el Internet, aunque el primero en versión limitada) estará el posible usuario en condiciones de juzgar si le puede ser útil. Dar más detalles "en el aire" no tiene mucho sentido. Por mi parte, tras haber usado el programa y después de varios meses de seguir la lista de correo sobre él, me parece una herramienta del más alto interés para investigadores y para todos los que tengan que trabajar con datos complejos o que requieren cierta complejidad en el análisis, sea en el campo que sea.
¿Cambiarán estos programas nuestra forma de trabajar? ¿Encontraremos en ellos algo parecido a una varita mágica del conocimiento?. Estoy convencido de que este tipo de programas no hacen sino reproducir procedimientos que muchos investigadores de todas las épocas han conocido y usado. El ordenador, con un programa como el aquí descrito, no va a inventar nada por nosotros (tampoco creo que nos vaya a tiranizar ni a coartar nuestra creatividad), simplemente va a ampliar nuestras posibilidades.